ASÍ ES LA FLOTA DE OPROMAR
Arrastreros, cerqueros, palangreros…los buques pesqueros pueden ser de un tipo u otro en función de su arte de pesca y/o las especies que capturan por ello, desde OPROMAR, vamos a hablar de las diferencias entre unos y otros.
Actualmente la flota de OPROMAR está compuesta por un total de 45 buques entre los cuales encontramos 19 arrastreros, 2 bacaladeros, 4 cerqueros y 20 palangreros.
Los buques arrastreros son aquellos que emplean redes de arrastre para la captura de una gran variedad de especies como pota, calamar, gallo, rape, raya, merluza, jurel, bacaladilla, etc. La red de arrastre tiene forma de embudo y posee dos alas que se encuentran unidas al barco mediante dos cables metálicos. Para mantener la red abierta la parte superior de la boca de la red presenta varios flotadores, la parte inferior está lastrada con pesos, y cada ala cuenta con una «puerta», generalmente metálica.
La red es arrastrada cerca del fondo marino por el buque que rastrea el fondo marino remolcada por una embarcación. En lo que respecta a la duración de las mareas, estas pueden ser de entre uno y 7 días, en función del caladero de trabajo.
La flota de arrastre de OPROMAR opera en los caladeros de Cantábrico Noroeste, Portugal y en terceros países bajo acuerdos internacionales de pesca, como es el caso de la flota de arrastre de fresco que cuenta con la marca de garantía «Merluza Negra de Pesca Responsable«.
En el caso de los buques bacaladeros, estos emplean artes de arrastre para capturar, principalmente, bacalao.
Aunque el arte de arrastre siempre ha sido uno de los menos selectivos, OPROMAR ha llevado a cabo varias iniciativas de mejora de la selectividad para este tipo de artes. Así, junto con científicos e investigadores, OPROMAR ha llevado a cabo proyectos como DESCARSEL, MENDES 1 y 2, MARINLIGHT o PISCIS.
Los cerqueros son aquellos buques que utilizan el arte de cerco como método de pesca. Este arte permite la captura de cardúmenes de pescado azul como caballa, jurel, sardina, anchoa…La red, de hilo, está compuesta por un paño rectangular que cuenta, en su parte superior, con boyas o flotadores, y con plomos en su parte inferior. Además para poder cerrar la red, esta cuenta con un cabo inferior llamado «jareta» que permite embolsar el pescado. Para llevar a cabo la captura del pescado, la red se larga de manera que va rodeando el cardumen, una vez se cierra el cerco, la jareta permite cerrar la red por la parte inferior, permitiendo la captura del cardumen.
El cerco tiene una particularidad y es que, al no provocar la muerte del pescado, este puede ser abierto liberando el cardumen. Esta práctica se conoce como «slipping».
En lo que respecta a duración de las mareas, estas son de 9 – 12 h aproximadamente, realizándose por la tarde – noche. La flota cerquera de OPROMAR opera en Cantábrico Noroeste y Portugal.
Por último, los buques palangreros son aquellos que utilizan artes de palangre para la captura de distintas especies tales como pez espada, tintorera, atún, bonito o marrajo. El palangre es uno de los artes más selectivos, pudiendo ser este de fondo o de superficie. En el caso de los buques palangreros de OPROMAR, estos utilizan el palangre de superficie que consiste en una línea única de la que cuelgan los anzuelos.
Los palangreros realizan mareas de entre 1 y 6 meses, en función del caladero que, en el caso de la flota de OPROMAR, operan en aguas del océano Atlántico y Pacífico.
